Son muchas las personas que en su día a día se quejan
constantemente. De hecho, reducir estas quejas forma parte de los objetivos
anuales de muchos de nosotros.
Estos lamentos con frecuencia no hacen referencia a
problemas graves ni a molestias constantes, incluso muchas veces no van
acompañadas de un malestar significativo.
¿Cuántas veces has escuchado o dicho: “que cansado
estoy”, “que frío hace” …?, cuando valorándolo desde otra perspectiva, este
no es un problema real o que necesite mayor atención.
Todas estas quejas van acompañadas de un problema, y es que
nos hacen más infelices, tenemos el foco constantemente puesto en
aquello que nos genera malestar o incomodidad, sin prestar atención a todas las
situaciones que sí nos aportan placer o nos pueden hacer felices.
Estas quejas cumplen la función de amortiguar el malestar o
minimizar la frustración. Y aunque inicialmente esta función parecen cumplirla,
a largo plazo representan un problema.
El poder compartir nuestras quejas con otras personas nos
puede hacer sentir apoyados, aunque en realidad únicamente conseguimos reforzar
este patrón, y mantenerlo en el tiempo, como una forma de vida.
Ante los problemas que nos hacen sentir mal, la queja no es
ninguna solución, aceptando en cambio que muchas cosas no van por el
camino que nos gustaría, e iniciando acciones para aliviar este malestar es
donde empezaremos a notar los cambios.
Cuando mis pacientes se enfrentan a un problema que les
frustra, siempre hago la primera pregunta: ¿ahora mismo tiene solución?, si la
respuesta es sí, busco una movilización para lograr resolver esa situación
frustrante. Dividiendo el problema en objetivos realistas y a corto- medio
plazo. Si la respuesta es no, lo primero que necesito lograr es la aceptación
del problema, ya que no está en su mano resolverlo.
Por último y a modo de reflexión, todas estas quejas nos están
impidiendo disfrutar de muchas cosas positivas que nos pueden estar pasando. Te
propongo algo… cada vez que verbalices una queja en esta próxima semana,
acompáñala de algo positivo que te esté pasando en el día, por pequeño que sea.
No hay comentarios:
Publicar un comentario